El correcto funcionamiento de nuestro organismo vine dado cuando existe un equilibrio entre nuestra parte física, mental, emocional y espiritual. Dicho equilibrio lo podemos denominar Salud.
La pérdida de dicho equilibrio en cualquiera de estas partes, ya sea la física, la química, la emocional o la espiritual conlleva una disfunción o enfermedad.
Estas partes no pueden y de hecho no funcionan por separado y para conseguir sanar cualquiera de ellas hay que corregir dicho desequilibrio trabajando sobre todas a la vez. Por razones didácticas y de comprensión cuando se enseña facilitación de campo se hacer por separado, pero el hecho, es que no existe una separación entre ellas.
El ser humano es como un aparato transmisor/receptor y toda la información que transmite y recibe está disponible en el campo, un facilitador aprende diferentes técnicas para poder averiguar dicha información y de esa manera ayudar a la persona en su proceso de sanación, cuando nos referimos a sanación no hablamos de curar los síntomas, si no de encontrar ese equilibrio entre todas las partes que componen al ser humano.
El facilitador aparte de interactuar con la información del campo lo hace también con el potencial puro, desde su Yo Original, todas las personas tenemos esa capacidad, pero hay que redescubrirla, ya que está dormida en nosotros por nuestros sistemas de creencias y programas. Una vez que la persona la redescubre nunca más la podrá olvidar. El potencial puro ayuda a otros a sintonizar con su Yo Original y así trabajar en todos los planos, el físico, el mental el emocional y el espiritual.
Es una técnica no invasiva que proporciona grandes beneficios tanto para el paciente como para el facilitador.
La facilitación de pulso de campo es un camino a todas las posibilidades, trabajando desde nuestro SER.